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Hincar los codos: ergonomía visual


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Hincar los codos: ergonomía visual

ERGONOMÍA VISUAL

A continuación te daremos unas pautas para mejorar tu rendimiento visual en cerca, de este modo mejorarás tu productividad en el trabajo o en el estudio. Esto también ayudará a eliminar o reducir los síntomas asociados, en caso de que los tengas. Tales como: dolor de cabeza, dolor de ojos, lagrimeo, enrojecimiento, visión borrosa… Las pautas incluyen hábitos posturales, consideraciones sobre el entorno donde realizas la tarea y los descansos que efectúas.

  • Iluminación General:

Todas las paredes de la habitación donde realizas la tarea, deben estar iluminadas, bien sea con luz natural o artificial. Es realmente perjudicial que estudies a oscuras.

  • Iluminación Local

Sitúa un flexo abatible y con una anchura proporcionada para iluminar la tarea, así conseguirás una iluminación homogénea. Colócalo por debajo de tus ojos e incidiendo de izquierda a derecha, en el caso de que seas diestro y  a la inversa si eres zurdo.

  • Plano de Lectoescritura

Procura que la superficie de apoyo tenga un acabado mate y con un plano de inclinación de 45º. Si tu mesa no es abatible utiliza un atril. La distancia a la lectura no debe ser menor de 40 cm, puedes tomar como referencia la distancia existente entre tu codo y la primera falange de tu dedo corazón.

  • Mesa y Silla

Es muy importante el mobiliario con el que cuentas y cómo está dispuesto. Cada persona tiene una altura y dimensiones diferentes, lo ideal es personalizarlo.

– Intenta utilizar una silla con palanca elevadora y respaldo abatible que te permita apoyar la espalda y la zona lumbar, manteniendo una postura recta y erguida. Regula la altura para que una vez apoyados los pies en el suelo, tus piernas y muslos formen un ángulo de 90º. Si la silla tiene reposabrazos, te ayudarán a estar más cómodo.

– La mesa debería tener unas dimensiones tales que no presione tus muslos ni rodillas, debería existir un espacio entre ambos.

– Sitúa la pantalla de tu ordenador a una distancia equivalente a la de tus brazos extendidos, en un plano inferior a los ojos y con una inclinación que evite los reflejos.

  • Descansos

Programa descansos de modo que, cada cierto tiempo, cambies el plano de enfoque de tus ojos. Resulta muy beneficioso y evitarás que tu sistema visual se sature. Por ejemplo, echa una ojeada a través de una ventana o un pasillo y fíjate en objetos que estén más alejados. Después podrás reanudar la tarea.

Existe una sencilla recomendación llamada Regla 20/20/20. Consiste en establecer descansos de 20 segundos cada 20 minutos llevando la mirada a 20 pies, lo que equivale a 6m.

Nunca permanezcas más de 1 hora trabajando o estudiando sin realizar descansos.

Si pones en práctica estas pautas y aún así sigues experimentando síntomas, ponte en contacto con tu optometrista para que evalúe personalmente el caso.

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